Nova es una distribución de GNU/Linux desarrollada por estudiantes y profesores de la Universidad de las Ciencias Informáticas, con la participación de miembros de otras instituciones, para apoyar la migración a tecnologías de Software Libre y Código Abierto que experimenta Cuba como parte del proceso de Informatización de la Sociedad.
Permite realizar trabajos de oficina, reproducir archivos de música y vídeo, navegar por Internet, ver fotografías y utilizar múltiples aplicaciones útiles para su desempeño laboral y momentos de ocio. Provee un sistema cómodo, enfocado al usuario final, garantizando una interacción intuitiva que persigue minimizar el cambio brusco al que se enfrentan las personas familiarizadas con sistemas Microsoft Windows.
Para Cuba resulta una utopía el acceso a las aplicaciones tecnológicas desarrolladas para software propietario, como resultado de la política de bloqueo económico y financiero que el gobierno de Estados Unidos mantiene sobre la isla, y ante el dominio de Microsoft en el mercado internacional de sistemas operativos. Pero poco a poco la realidad parece revertirse.Según publica hoy el diario Granma, con la creación del Proyecto Nova, un sistema operativo propio basado en una distribución de GNU/Linux, la acertada apuesta del país por la migración ordenada hacia plataformas de informatización de código abierto, que se viene orientando desde hace aproximadamente cinco años, recibió un gran impulso en el 2009.
El Grupo Técnico Nacional para la Migración a Software Libre, dentro del proceso de informatización de la sociedad, presentó este jueves su versión 3.0, en el recinto ferial PABEXPO del Palacio de Convenciones de La Habana.
El ingeniero informático Alan Pierra Fuentes, miembro del Grupo Técnico, destacó que en primera instancia, esta nueva entrega «está hecha por los cubanos y para los cubanos».
El experto explicó además que «su implementación y distribución están encaminadas a lograr altos estándares de excelencia en materia de independencia y soberanía tecnológicas sobre los productos y soluciones informáticas de factura nacional, sin perder de vista su elevada capacidad para adaptarse a cualquier soporte o sistema».
«Nova representa el avance del país en este campo, a partir del trabajo con un modelo de desarrollo tecnológico colaborativo, que incluye el acceso al código fuente y garantiza una mayor protección del sistema frente a la invasión de aplicaciones malignas y la existencia de puertas traseras, aunque no lo hace invulnerable», precisó en la XIV Convención Internacional Informática 2011.
Personajes destacados
Hector Rodriguez
Héctor Rodríguez Figueredo, vicerrector de la Universidad de Ciencias Informáticas (UCI) y director del Grupo, coincidió en que en este sector Cuba defiende el desarrollo de herramientas y aplicaciones propias, específicas para nuestro sistema empresarial, evitando tener que adquirirlas en el mercado internacional a precios millonarios.
Para ello, casi 30 800 paquetes de aplicaciones informáticas para Nova ya están disponibles en el portal www.nova.cu, diseñados de manera que su instalación, eliminación y actualización en el sistema sea más agradable para todos los usuarios al migrar de software propietario a libre.
La industria cubana de hardware se une a la iniciativa a través de empresas como GEDEME Electrónica, que ya están ensamblando los ordenadores que se comercializan en el país, los cuales portarían tanto a Nova como a Windows.
Según Pierra, el lanzamiento de la versión 3.0 también incluye las variantes Nova Escritorio, para trabajo común de navegación, mensajería y ofimática a partir de una interfaz amigable y asequible a los usuarios; otra versión para Servidores, encargada de atender los servicios telemáticos comunes como correo electrónico y servidores web, que ahora pueden ser administrados de manera más sencilla; y por último el Nova Ligero, de cómodo empleo en aquellos equipos de bajas prestaciones que circulan todavía en el país.
«Al principio realmente había un alto nivel de desconocimiento sobre las características de este sistema operativo, además la mayoría de los cubanos no estamos acostumbrados a trabajar con plataforma de este tipo, por lo que es frecuente y comprensible encontrar cierta resistencia al cambio», reconoce el vicerrector de la UCI.
Es un proyecto joven —agregó— con mucho camino por recorrer, confiamos en que gracias a la capacitación y a la difusión del tema en conferencias y eventos, así como a través del trabajo de los Joven Club en el sector comunitario, una de las principales vías de retroalimentación para perfeccionar las potencialidades de Nova, el país estará listo para dar el salto definitivo.