El primer Service Pack (SP1) para Windows 7 ya está vivo y listo para descargar. Como tradicionalmente ocurre con los Service Packs, se trata de una actualización más bien grande que incluye los mayores cambios al sistema operativo desde su lanzamiento en 2009.
Hay varias formas de obtener SP1, pero antes de empezar a descargar hay que tener en cuenta que necesitas alrededor de 1 GB de espacio en tu partición de Windows para poder instalarlo. La cantidad dependerá de la versión de Windows que tengas instalada, y de si es que ya descargaste todos los parches de seguridad anteriores o no. La instalación toma al menos media hora.
La mayoría de los usuarios recibirá la actualización de forma automática a través de Windows Update. La otra alternativa es descargarlo directamente desde el Microsoft Download Center – en ambos casos hay que tener Windows original, obviamente.
¿Qué trae de nuevo?
Según hemos visto, hay pocas novedades visibles y la mayoría de las actualizaciones corresponden a mejoras de seguridad, parches de «hoyos» y mejoras en la estabilidad del sistema operativo, lo que no es menor.
Algunas de las mejoras más notorias son:
Arreglo del bug que hacía que los equipos de audio conectados por HDMI dejaran de funcionar cuando se reiniciaba el PC.
Corrección de los problemas causados por la impresión de documentos XPS.
Cambios en el comportamiento de la función «Restaurar carpetas al iniciar sesión» de modo que las carpetas sean restauradas a su posición anterior, en lugar de ordenarlas de acuerdo a cuáles fueron más usadas recientemente.
IE9 no requerirá la instalación del SP1. Cuando instales IE9, el navegador actualizará automáticamente el sistema operativo con algunas de las cosas del service pack si es que no lo tienes para entonces.
Hay mejoras en las funciones de virtualización para quienes tengan Windows Server 2008 R2.
La lista completa de los parches que incluye SP1 se puede ver aquí. Si ya actualizaste, cuéntanos cómo te fue en los comentarios.