En diciembre de 1998, cuando las consolas con gráficos poligonales tenían apenas unos años de vida y elementos como el «stick analógico» o la vibración en el mando daban sus primeros pasos (recordemos Star Fox 64, lanzado en 1997), se produjo un hito en el mundo del videojuego: salía a la venta The Legend of Zelda: Ocarina of Time para Nintendo 64. Este fue ni más ni menos el primer juego en el que podías moverte con total libertad por todo el escenario, inventó un sistema de combate en tiempo real que sigue en uso en juegos actuales y entregó… Continuar leyendo