Con esta significativa mejora pasamos de los actuales 4.5W hasta los 100W permitiéndo a esta tecnología alimentar a la mayoría de equipos portátiles (antes era imposible) y demás dispositivos móviles que existen en el mercado y soporten USB 3.0.
El aumento de la capacidad de transferencia de energía a través de los puertos USB 3.0. supone además la superación de la necesidad de usar una cargador diferente para cada equipo.
Se espera que este cambio en la capacidad y utilidad de esta herramienta pueda llegar a provocar la aparición en el medio plazo, de diferentes productos USB (cargadores universales) dirigidos a mejorar la carga de todo tipo de dispositivos.
Con la próxima celebración del USB Power Delivery Developers Day que tendrá lugar el próximo 2 de agosto podrían darse a conocer más novedades de esta nueva versión del estándar para la conectividad informática que conocemos como USB 3.0.
Puedes dar un vistazo a la nota del USB 3.0 Promoter Group desde www.usb.org.